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El Códice de la Priora Blanca de Aragón, la ermita de la Virgen del Consuelo de Camañas y la procesión de las Panbenditeras de Escatrón y Mazaleón declarados Bien de Interés Cultural
El Boletín Oficial de Aragón ha publicado las declaraciones como Bien de Interés Cultural del Códice de la Priora Blanca de Aragón, procedente en origen del Real Monasterio de Santa María de Sijena (Huesca), de la ermita de la Virgen del Consuelo de Camañas (Teruel) y de la Procesión de las Panbenditeras de Escatrón (Zaragoza) y de Mazaleón (Teruel).
El Códice de Doña Blanca de Aragón es un manuscrito en latín, en letra gótica aragonesa de los siglos XIV-XV, procedente, en su origen, del Archivo del Real Monasterio de Santa María de Sijena. Es un volumen con unas dimensiones medias y de 187 hojas elaboradas en pergamino de diversa calidad. La calidad de su factura indica que se trataría desde su origen, de un objeto valioso que sería cuidado como tal y habría de conservarse en el Archivo o algún otro lugar de privilegio. El texto, en latín, está escrito a renglón seguido, con una media de 26 líneas por plana, en letra gótica aragonesa, en dos tintas y escrita sin lujo, pero con claridad.
El Códice es un documento de gran importancia para conocer la historia del monasterio de Sijena y de su comunidad religiosa. Gracias a él se puede reconstruir parte de las costumbres y de la liturgia específica sijenense.
La ermita de la Virgen del Consuelo de Camañas es una sencilla construcción de una sola nave de mampostería, con dos tramos conservados y cubierta a dos aguas de madera y teja árabe sobre arcos diafragma. La nave central desemboca en un ábside semicircular cubierto mediante bóveda de horno apuntada y con canecillos hacia el exterior. Por su parte, el interior está decorado con pinturas murales, con la tradicional representación del Pantocrátor rodeado por el Tetramorfos. Todo ello guarda relación con el modelo de primitivas iglesias de reconquista de tradición románica.
Camañas fue conquistada por Alfonso I de Aragón entre 1120 y 1127 (fecha de la toma de Daroca y la fortificación de Cella). Más adelante, fue parte de las tierras del fuero que Ramón Berenguer IV dio a Daroca, en 1142.
Por último, la Procesión de las Panbenditeras de Escatrón (Zaragoza) y de Mazaleón es una celebración con una larga evolución histórica con muchas similitudes a rituales que arraigan en las culturas grecolatinas de la antigüedad; en Aragón se conservan con gran vitalidad dos magníficos ejemplos en Escatrón (Zaragoza) y Mazaleón (Teruel).
El desfile de las comúnmente denominadas Panbenditeras tienen como elemento material protagonista el pan bendecido o bendito, el pan bueno. Existen muchas tradiciones relacionadas con el pan bendito, protagonista de numerosos actos populares religiosos. La peculiaridad de esta tradición en las localidades citadas es la manera de manifestarla: el día de Santa Águeda, las mujeres jóvenes salen en procesión llevando un cestillo sobre sus cabezas que contiene la ofrenda del pan bendito.
La figura de las actuales panbenditeras proviene de las canéforas griegas y romanas, doncellas vírgenes que desfilaban con ocasión de las festividades en honor de diosas como Atenea en Atenas, Artemisa, Démeter o Hera en Argos.