Talla de San Miguel de Villacarli
Imagen de madera en bulto redondo que conserva algunos restos de policromía y representa al arcángel San Miguel realizando la psicostasis o pesaje de las almas mientras pisotea a Lucifer.
Aparece en forma de joven guerrero triunfador con la melena corta con flequillo y la cabeza cubierta con un sencillo bonete. Viste una cota de malla hasta la cadera y posiblemente sin mangas, bajo la que asoma una túnica corta con refuerzos metálicos y protecciones también metálicas en las rodillas. Se cubre con una capa ceñida a la altura del pecho con un gran broche romboidal y que cae en los laterales con un sumario plegado.
Parece que la figura no tuvo alas originalmente y se han perdido la balanza que llevaba en la mano izquierda y buena parte de la lanza que empuñaba con la derecha cuyo extremo se hincaba en el demonio que está a sus pies. A este demonio, que tiene el aspecto de un ser antropomorfo, le faltan también parte de la cola y las pezuñas.
Es una escultura devocional de cierto carácter popular, caracterizada por la desproporción entre el cuerpo y la cabeza y los rasgos ingenuos e inexpresivos.
Para García Lasheras es obra de un imaginero relacionado con el maestro que talló otras dos imágenes del arcángel, la de Troncedo y la de Fanlo (actualmente en el Museo Diocesano de Barbastro), conocedor de las corrientes estilísticas europeas de mediados del siglo XV y que habría instalado su taller en las tierras orientales oscenses.
La vestimenta del santo y sobre todo el tipo de indumentaria militar sirve a Lorés, autora de las fichas de esta pieza en los catálogos Pulchra y Millenum, para datar al San Miguel de Villacarli en el siglo XIV, en concreto en la primera mitad, cronología con la que coincide Naval Mas. Sin embargo, creemos más oportuna la datación de García Lasheras que la retrasa hasta el siglo XV, puesto que en estas tallas devocionales de claro carácter popular se repiten modelos estereotipados en el vestir asimilados por artistas locales, que aparecen en la imaginería aún décadas después de dejarse de usar.
Historia
Siglo XIV - XV
Siglo XIX
Es propiedad del Obispado de Barbastro-Monzón tal y como recoge el Razonamiento Jurídico Sexto, punto 9, del Decreto de la Congregación para los Obispos de 8 de septiembre de 2005.
Declaración. Siglo XXI, 2011
Siglo XXI, 2021
Bibliografía relacionada
Imagen de madera en bulto redondo que conserva algunos restos de policromía y representa al arcángel San Miguel realizando la psicostasis o pesaje de las almas mientras pisotea a Lucifer.
Aparece en forma de joven guerrero triunfador con la melena corta con flequillo y la cabeza cubierta con un sencillo bonete. Viste una cota de malla hasta la cadera y posiblemente sin mangas, bajo la que asoma una túnica corta con refuerzos metálicos y protecciones también metálicas en las rodillas. Se cubre con una capa ceñida a la altura del pecho con un gran broche romboidal y que cae en los laterales con un sumario plegado.
Parece que la figura no tuvo alas originalmente y se han perdido la balanza que llevaba en la mano izquierda y buena parte de la lanza que empuñaba con la derecha cuyo extremo se hincaba en el demonio que está a sus pies. A este demonio, que tiene el aspecto de un ser antropomorfo, le faltan también parte de la cola y las pezuñas.
Es una escultura devocional de cierto carácter popular, caracterizada por la desproporción entre el cuerpo y la cabeza y los rasgos ingenuos e inexpresivos.
Para García Lasheras es obra de un imaginero relacionado con el maestro que talló otras dos imágenes del arcángel, la de Troncedo y la de Fanlo (actualmente en el Museo Diocesano de Barbastro), conocedor de las corrientes estilísticas europeas de mediados del siglo XV y que habría instalado su taller en las tierras orientales oscenses.
La vestimenta del santo y sobre todo el tipo de indumentaria militar sirve a Lorés, autora de las fichas de esta pieza en los catálogos Pulchra y Millenum, para datar al San Miguel de Villacarli en el siglo XIV, en concreto en la primera mitad, cronología con la que coincide Naval Mas. Sin embargo, creemos más oportuna la datación de García Lasheras que la retrasa hasta el siglo XV, puesto que en estas tallas devocionales de claro carácter popular se repiten modelos estereotipados en el vestir asimilados por artistas locales, que aparecen en la imaginería aún décadas después de dejarse de usar.
Historia
Siglo XIV - XV
Siglo XIX
Es propiedad del Obispado de Barbastro-Monzón tal y como recoge el Razonamiento Jurídico Sexto, punto 9, del Decreto de la Congregación para los Obispos de 8 de septiembre de 2005.