San Vicente Ferrer

Se trata de una obra de óleo sobre lienzo que representa a San Vicente Ferrer (de 91,3 x 60 centímetros y un marco de 7 centímetros). 

Con un paisaje de fondo, el santo aparece representado en el centro de la composición con una serie de atributos iconográficos que lo identifican. En primer lugar, viste el hábito dominico, signo de su pertenencia a la Orden de Santo Domingo. La tonsura es signo de consagración en el estado clerical. Tiene el brazo en derecho en alto, apuntando al cielo y su cabeza se rodea de llamas indicando que estaba iluminado por el Espíritu Santo y también recuerda que tenía don de leguas. El par de alas en su espalda recuerda la predicación del santo y representan tanto su bondad y como el hecho de parecer un ángel del Apocalipsis, idea esta amplificada con la trompeta que porta en la mano izquierda y su lema «Timete Deum» (temed a Dios). Lleva también el Evangelio, llamando así a la conversión y al seguimiento a Cristo.

Perteneciente al ayuntamiento de Calatayud (Zaragoza), la obra está datada cronológicamente en el año 1628. De autor desconocido, presenta en la parte inferior una inscripción: «Goya. Mil seiscientos y veintiocho».

El lienzo fue restaurado en el taller de restauración del Museo Provincial de Bellas Artes de Zaragoza.