Muralla de Épila
En la actualidad la muralla de Épila se confunde con la cantidad de edificios que se construyeron sobre su base, como es el caso de los bajos del palacio del Conde de Aranda, situado en frente y a una menor altura de la iglesia de la localidad.
Sin embargo, los restos más apreciables se presentan en un cubo de muralla, situado al comienzo de la calle «Entremuros» y un murete en un tramo de la misma. Aparece sillar, en el zócalo del palacio del Conde de Aranda, tanto en la fachada principal como en la posterior y en la parte baja del pasadizo que comunica el palacio con el convento de las concepcionistas.
Por estos restos se piensa que las murallas de Épila fueran de piedra, y que el casco urbano de la población estuvo amurallado hasta 1790 por muros de piedra y tapial.
Historia
Declaración. Siglo XXI, 2006
Bibliografía relacionada
En la actualidad la muralla de Épila se confunde con la cantidad de edificios que se construyeron sobre su base, como es el caso de los bajos del palacio del Conde de Aranda, situado en frente y a una menor altura de la iglesia de la localidad.
Sin embargo, los restos más apreciables se presentan en un cubo de muralla, situado al comienzo de la calle «Entremuros» y un murete en un tramo de la misma. Aparece sillar, en el zócalo del palacio del Conde de Aranda, tanto en la fachada principal como en la posterior y en la parte baja del pasadizo que comunica el palacio con el convento de las concepcionistas.
Por estos restos se piensa que las murallas de Épila fueran de piedra, y que el casco urbano de la población estuvo amurallado hasta 1790 por muros de piedra y tapial.