Monasterio Nuevo de San Juan de la Peña
Contacto
Turismo de Aragón
9743551191 noviembre - 15 marzo: de 10 a 14 h. (excepto sábados: 10 a 17 h.)
16 marzo - 31 mayo: de 10 a 14 y de 15:30 a 19 h.
1 junio - 31 agosto: de 10 a 14 y de 15 a 20 h.
1 septiembre - 31 octubre: de 10 a 14 y de 15:30 a 19 h.
Acceso
Horario
1 noviembre – 15 marzo: de 10 a 14 h. (excepto sábados: 10 a 17 h.)
16 marzo – 31 mayo: de 10 a 14 y de 15:30 a 19 h.
1 junio – 31 agosto: de 10 a 14 y de 15 a 20 h.
1 septiembre – 31 octubre: de 10 a 14 y de 15:30 a 19 h.
Condiciones de acceso:
Compra de entradas: https://www.turismodearagon.com/tickets-online/
La entrada da acceso al Monasterio Viejo y al Monasterio Nuevo, situados a 1,5 km. uno del otro.
También permite visitar el interior de la iglesia románica de Santa María, ubicada en Santa Cruz de la Serós.
Enlaces relacionados
El monasterio nuevo de San Juan de la Peña se convirtió, a partir del siglo XVIII, en la morada de los monjes que ocuparon el Real Monasterio de San Juan de la Peña desde el siglo XI. Tras siglos de penurias económicas y el pavoroso incendio que sufre el monasterio en 1675, la Congregación de los benedictinos tarraconenses aprueba el traslado a un edificio nuevo situado en la cercana llanura de San Indalecio. La nueva sede fue terminada en 1714 y la comunidad de monjes se estableció allí hasta 1835. Actualmente es un gran centro cultural que ofrece servicios turísticos y la posibilidad conocer mejor la historia de estos monjes y del nacimiento del Reino de Aragón.
El nuevo conjunto monacal se edificó siguiendo las pautas arquitectónicas del estilo barroco. Fabricado en ladrillo se rodeaba de una pequeña muralla que encerraba diversas dependencias dispuestas en torno a una gran plaza y dos claustros. Todas las estancias se distribuían a ambos lados de la plaza en dos alas, siguiendo el modelo de monasterio ideal de san Filiberto. De esta manera la iglesia se situaba en el tradicional eje este-oeste; contaba una cámara para el abad y con 19 celdas privadas en el lado sur, con acceso al claustro y a un jardín; en el ala oeste se ubicaba el salón de ministros junto al archivo y en el norte un refectorio con cocina y la enfermería, además de varias bodegas y graneros y una gran librería. Para los peregrinos se habilitó un hospital, la hostelería y caballerizas.
En el centro se alzaba la iglesia dedicada a San Juan Bautista. Tenía tres amplias naves cubiertas por bóveda de cañón con lunetos, seis capillas laterales, cabecera recta flanqueada por dos estancias y falso crucero cubierto por una gran cúpula. Sobre todo destaca su portada occidental en ladrillo y su profusa decoración barroca realizada por el escultor pamplonés Pedro Onofre sobre un diseño anterior del pintor Francisco del Plano. Posee tres entradas bajo arco de medio punto flanqueado por pilastras y un entablamento un rematado por pináculos. En hornacinas se alojan las imágenes de San Indalecio, San Juan Bautista, y San Benito. La fachada termina con un remate triangular y dos torres a los lados.
El edificio se abandona en 1835, comenzando así una fase de deterioro progresivo que provocará su ruina. En 1998 se constituye la Gestora turística de San Juan de la Peña, para llevar a cabo un plan de rehabilitación del complejo y convertirlo en un gran centro turístico y cultural. Las obras comenzaron en el año 2000 y se inauguró en junio de 2007. La iglesia barroca es ahora sede del Centro de Interpretación del Reino de Aragón en el que se explica de manera interactiva el origen de Aragón y el papel que jugó esta comunidad religiosa en su evolución histórica. Sobre las ruinas del monasterio nuevo se ha construido el Centro de Interpretación del Monasterio. Se trata de un moderno edificio en el que se han reproducido los ambientes originales en los que convivieron los monjes de San Juan de la Peña.
Historia
Construcción original. Siglo XVII
Demolición parcial. Siglo XIX
Cambio de propiedad. Siglo XIX
Declaración. Siglo XX, XXI
Restauración. Siglo XXI
Musealización. Siglo XXI
Bibliografía relacionada
El monasterio nuevo de San Juan de la Peña se convirtió, a partir del siglo XVIII, en la morada de los monjes que ocuparon el Real Monasterio de San Juan de la Peña desde el siglo XI. Tras siglos de penurias económicas y el pavoroso incendio que sufre el monasterio en 1675, la Congregación de los benedictinos tarraconenses aprueba el traslado a un edificio nuevo situado en la cercana llanura de San Indalecio. La nueva sede fue terminada en 1714 y la comunidad de monjes se estableció allí hasta 1835. Actualmente es un gran centro cultural que ofrece servicios turísticos y la posibilidad conocer mejor la historia de estos monjes y del nacimiento del Reino de Aragón.
El nuevo conjunto monacal se edificó siguiendo las pautas arquitectónicas del estilo barroco. Fabricado en ladrillo se rodeaba de una pequeña muralla que encerraba diversas dependencias dispuestas en torno a una gran plaza y dos claustros. Todas las estancias se distribuían a ambos lados de la plaza en dos alas, siguiendo el modelo de monasterio ideal de san Filiberto. De esta manera la iglesia se situaba en el tradicional eje este-oeste; contaba una cámara para el abad y con 19 celdas privadas en el lado sur, con acceso al claustro y a un jardín; en el ala oeste se ubicaba el salón de ministros junto al archivo y en el norte un refectorio con cocina y la enfermería, además de varias bodegas y graneros y una gran librería. Para los peregrinos se habilitó un hospital, la hostelería y caballerizas.
En el centro se alzaba la iglesia dedicada a San Juan Bautista. Tenía tres amplias naves cubiertas por bóveda de cañón con lunetos, seis capillas laterales, cabecera recta flanqueada por dos estancias y falso crucero cubierto por una gran cúpula. Sobre todo destaca su portada occidental en ladrillo y su profusa decoración barroca realizada por el escultor pamplonés Pedro Onofre sobre un diseño anterior del pintor Francisco del Plano. Posee tres entradas bajo arco de medio punto flanqueado por pilastras y un entablamento un rematado por pináculos. En hornacinas se alojan las imágenes de San Indalecio, San Juan Bautista, y San Benito. La fachada termina con un remate triangular y dos torres a los lados.
El edificio se abandona en 1835, comenzando así una fase de deterioro progresivo que provocará su ruina. En 1998 se constituye la Gestora turística de San Juan de la Peña, para llevar a cabo un plan de rehabilitación del complejo y convertirlo en un gran centro turístico y cultural. Las obras comenzaron en el año 2000 y se inauguró en junio de 2007. La iglesia barroca es ahora sede del Centro de Interpretación del Reino de Aragón en el que se explica de manera interactiva el origen de Aragón y el papel que jugó esta comunidad religiosa en su evolución histórica. Sobre las ruinas del monasterio nuevo se ha construido el Centro de Interpretación del Monasterio. Se trata de un moderno edificio en el que se han reproducido los ambientes originales en los que convivieron los monjes de San Juan de la Peña.
Historia
Construcción original. Siglo XVII
Demolición parcial. Siglo XIX
Cambio de propiedad. Siglo XIX
Declaración. Siglo XX, XXI
Restauración. Siglo XXI
Musealización. Siglo XXI
Bibliografía relacionada
Contacto
Turismo de Aragón
9743551191 noviembre - 15 marzo: de 10 a 14 h. (excepto sábados: 10 a 17 h.)
16 marzo - 31 mayo: de 10 a 14 y de 15:30 a 19 h.
1 junio - 31 agosto: de 10 a 14 y de 15 a 20 h.
1 septiembre - 31 octubre: de 10 a 14 y de 15:30 a 19 h.
Acceso
Horario
1 noviembre – 15 marzo: de 10 a 14 h. (excepto sábados: 10 a 17 h.)
16 marzo – 31 mayo: de 10 a 14 y de 15:30 a 19 h.
1 junio – 31 agosto: de 10 a 14 y de 15 a 20 h.
1 septiembre – 31 octubre: de 10 a 14 y de 15:30 a 19 h.
Condiciones de acceso:
Compra de entradas: https://www.turismodearagon.com/tickets-online/
La entrada da acceso al Monasterio Viejo y al Monasterio Nuevo, situados a 1,5 km. uno del otro.
También permite visitar el interior de la iglesia románica de Santa María, ubicada en Santa Cruz de la Serós.