Iglesia del Salvador

La iglesia del Salvador de Ejea de los Caballeros fue construida entre finales del siglo XII y principios del siglo XIII en estilo románico tardío con algunos elementos góticos y renacentistas.

Es un edificio realizado en sillería de piedra arenisca de excelente talla, que presenta nave única con capillas y ábside poligonal. La transición al gótico se observa en la bóveda central, de cañón muy apuntado y en la cubierta de horno nervada del ábside. En época gótica se construyó una torre campanario almenada, elemento éste que otorga al conjunto el aspecto de baluarte militar al exterior.

Su sencillez arquitectónica contrasta con la interesante decoración figurada de sus dos portadas vinculadas al trabajo del «maestro de Agüero» o «maestro de San Juan de la Peña». La portada oeste, llamada de «penitentes» cuenta en el tímpano con un crismón sustentado por dos ángeles, mientras que en la portada norte, la principal, se representa en el tímpano la Última Cena y se hace un recorrido en torno la vida de Cristo y a la Redención a lo largo de sus arquivoltas. En los capiteles de ambas portadas se observa una serie de temas profanos como el flautista, el contorsionista, la bailarina o los grifos que simbolizan el pecado.

En su interior también se puede admirar el retablo mayor, joya del gótico internacional con influencias del hispano flamenco, comenzado por Blasco de Grañén en 1438 y concluido por Martín de Soria en 1476.