Ermita de Santa María
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La ermita de Santa María se levanta en un alto entre Chalamera y Alcolea de Cinca, en la confluencia de los ríos Cinca y Alcanadre, en un antiguo ramal del Camino de Santiago que procedente de Lérida y Fraga, en dirección al monasterio de Sijena y Huesca. Estuvo sujeta al monasterio de Santa María de Alaón.
Presenta planta de cruz latina con triple cabecera absidial, crucero y una sola nave de tres tramos. Los ábsides laterales, dispuestos en los brazos del crucero, son semicirculares al interior y rectos al exterior. El ingreso se realiza por dos puertas. La principal, a los pies, abre en arco de medio punto de anchas jambas, enmarcado por seis arquivoltas y seis pares de columnas con capiteles labrados figurados de hombres y animales, que representan temas simbólicos y escenas bíblicas como los misterios de la creación, la redención del hombre, el origen de la iglesia… Encima se ubica un ventanal de arco de medio punto y cuatro arquivoltas, que repite la configuración de la portada.
La otra portada se sitúa en el brazo Sur del crucero, es adintelada y aparece enmarcada por un arco de medio punto con un disco de gallones radiales en el tímpano. Con toda probabilidad esta puerta daría acceso al desaparecido claustro, del que se han conservado, en este muro meridional, ménsulas de piedra para sostener su techumbre de madera.
El exterior se decora con remates de modillones bajo el alero de las cubiertas. La nave y el crucero se cubren con un hastial escalonado y espadaña doble. El ábside se cubre con un derrame cónico y sobre el crucero destaca una cúpula octogonal con cubierta de forma de pirámide achatada. En el dintel de la portada aparece una roseta con la cruz de Jerusalém, símbolo de los templarios.
En el interior se exhiben los restos calcinados de la antigua imagen tallada en piedra de la Virgen María. En el ábside central se conservan restos de pinturas murales románicas que posiblemente sean la representación de una Anunciación.
En su entorno hay restos de cimentaciones aisladas y separadas del templo, que posiblemente corresponden a las distintas dependencias monásticas.
Historia
Construcción original. Siglo XI - XIII
- Románico tardío
Declaración. Siglo XX - XXI
Restauración. Siglo XX - XXI
Restauración. Siglo XXI
Bibliografía relacionada
La ermita de Santa María se levanta en un alto entre Chalamera y Alcolea de Cinca, en la confluencia de los ríos Cinca y Alcanadre, en un antiguo ramal del Camino de Santiago que procedente de Lérida y Fraga, en dirección al monasterio de Sijena y Huesca. Estuvo sujeta al monasterio de Santa María de Alaón.
Presenta planta de cruz latina con triple cabecera absidial, crucero y una sola nave de tres tramos. Los ábsides laterales, dispuestos en los brazos del crucero, son semicirculares al interior y rectos al exterior. El ingreso se realiza por dos puertas. La principal, a los pies, abre en arco de medio punto de anchas jambas, enmarcado por seis arquivoltas y seis pares de columnas con capiteles labrados figurados de hombres y animales, que representan temas simbólicos y escenas bíblicas como los misterios de la creación, la redención del hombre, el origen de la iglesia… Encima se ubica un ventanal de arco de medio punto y cuatro arquivoltas, que repite la configuración de la portada.
La otra portada se sitúa en el brazo Sur del crucero, es adintelada y aparece enmarcada por un arco de medio punto con un disco de gallones radiales en el tímpano. Con toda probabilidad esta puerta daría acceso al desaparecido claustro, del que se han conservado, en este muro meridional, ménsulas de piedra para sostener su techumbre de madera.
El exterior se decora con remates de modillones bajo el alero de las cubiertas. La nave y el crucero se cubren con un hastial escalonado y espadaña doble. El ábside se cubre con un derrame cónico y sobre el crucero destaca una cúpula octogonal con cubierta de forma de pirámide achatada. En el dintel de la portada aparece una roseta con la cruz de Jerusalém, símbolo de los templarios.
En el interior se exhiben los restos calcinados de la antigua imagen tallada en piedra de la Virgen María. En el ábside central se conservan restos de pinturas murales románicas que posiblemente sean la representación de una Anunciación.
En su entorno hay restos de cimentaciones aisladas y separadas del templo, que posiblemente corresponden a las distintas dependencias monásticas.
Historia
Construcción original. Siglo XI - XIII
- Románico tardío