Convento de San Valentín
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El convento de San Valentín de Báguena fue construido a comienzos del siglo XVII, a petición de los pueblos de la comarca. Los Padres franciscanos de la comunidad de Daroca propusieron la construcción del convento que albergaría a las monjas clarisas. El convento se sitúa en el extremo norte de la población, formando parte del casco urbano y contando con una plaza de acceso, en su entorno encontramos algún edificio representativo de las casas solariegas de ladrillo que se construyeron en Báguena entre los siglos XVI y XVIII.
El convento es una construcción sobria de mampostería y ladrillo, en la que la cantería se reserva para la portada principal. El convento presenta planta rectangular y cuenta con dos claustros en torno a los que se organizan el resto de las dependencias. Destaca la fachada este, de cuidada composición y diseño, en la que encontramos la portada principal dividida en dos cuerpos: el inferior, abierto en arco de medio punto entre pilastras acanaladas, y el superior constituido por un gran frontón partido, que enmarca un relieve entre pilastras coronado por entablamento y frontón curvo partido, rematado por la imagen de Santa Clara; todo ello está protegido por un tejadillo. En el resto de la fachada se disponen cuatro ventanas distribuidas simétricamente (dos por planta y con rejería de buena forja). El piso superior presenta una galería de arcos de medio punto doblados y enmarcados por pilastras. Remata la fachada una cornisa de ladrillo muy volada.
Adosada a las dependencias del convento encontramos la iglesia, de nave única de seis tramos y de cabecera poligonal. La cabecera y los cuatro primeros tramos de la nave se cubren con bóvedas de lunetos, mientras los dos tramos de los pies lo hacen con bóvedas de crucería estrellada, y las capillas con bóvedas de crucería simple. Destaca la decoración esgrafiada a base de motivos vegetales. En el exterior destacan los esbeltos contrafuertes, las ventanas en arco de medio punto abiertas y la puerta de acceso precedida de un pequeño atrio de reciente construcción.
Historia
Construcción original. Siglo XVII
Reforma. Siglo XX, 1960-01-01 - 1970-01-01
Declaración. Siglo XXI, 2002-10-08
Bibliografía relacionada
El convento de San Valentín de Báguena fue construido a comienzos del siglo XVII, a petición de los pueblos de la comarca. Los Padres franciscanos de la comunidad de Daroca propusieron la construcción del convento que albergaría a las monjas clarisas. El convento se sitúa en el extremo norte de la población, formando parte del casco urbano y contando con una plaza de acceso, en su entorno encontramos algún edificio representativo de las casas solariegas de ladrillo que se construyeron en Báguena entre los siglos XVI y XVIII.
El convento es una construcción sobria de mampostería y ladrillo, en la que la cantería se reserva para la portada principal. El convento presenta planta rectangular y cuenta con dos claustros en torno a los que se organizan el resto de las dependencias. Destaca la fachada este, de cuidada composición y diseño, en la que encontramos la portada principal dividida en dos cuerpos: el inferior, abierto en arco de medio punto entre pilastras acanaladas, y el superior constituido por un gran frontón partido, que enmarca un relieve entre pilastras coronado por entablamento y frontón curvo partido, rematado por la imagen de Santa Clara; todo ello está protegido por un tejadillo. En el resto de la fachada se disponen cuatro ventanas distribuidas simétricamente (dos por planta y con rejería de buena forja). El piso superior presenta una galería de arcos de medio punto doblados y enmarcados por pilastras. Remata la fachada una cornisa de ladrillo muy volada.
Adosada a las dependencias del convento encontramos la iglesia, de nave única de seis tramos y de cabecera poligonal. La cabecera y los cuatro primeros tramos de la nave se cubren con bóvedas de lunetos, mientras los dos tramos de los pies lo hacen con bóvedas de crucería estrellada, y las capillas con bóvedas de crucería simple. Destaca la decoración esgrafiada a base de motivos vegetales. En el exterior destacan los esbeltos contrafuertes, las ventanas en arco de medio punto abiertas y la puerta de acceso precedida de un pequeño atrio de reciente construcción.