Castillo Palacio de los Se y Castro
Existen datos de esta población desde el 1093, fecha en que fue conquistada y a partir de entonces tuvo diferentes tenentes. En el siglo XIII pasó a ser propiedad de Jimeno González de Pomar y en 1429 era del barón de Fréscano. A finales del siglo XVI pertenecía al conde de Guimerá que al morir sin descendencia pasó a los Villahermosa.
El conjunto tiene una planta rectangular de aproximadamente 26 x 16 metros. Este castillo palacio conserva únicamente su parte baja, de sillería, ya que el resto ha sido transformado. La construcción original se encuentra muy alterada, pues hoy se integra en un edificio que sirve de almacén. Puede verse en la parte inferior de los muros S y O, de sillares de piedra arenisca. En el ángulo que forman quedan dos paredes de lo que podría ser una torre rectangular, con la base en talud y un ventanuco apuntado. Hay otros restos de una posible torre, de similar estructura subsisten en el extremo nororiental.
Se pueden apreciar también restos de vanos y puerta y alguna aspillera.
El acceso pudo estar localizado en la zona oriental y esta cara y la norte debieron de estar rodeadas por un foso, aunque toda esta área ha desaparecido. En los lados de la roca donde se asienta, hay una serie de aperturas que podrían ser entradas a bodegas o silos.
Historia
Construcción original. Siglo XV
Declaración. Siglo XXI
Bibliografía relacionada
Existen datos de esta población desde el 1093, fecha en que fue conquistada y a partir de entonces tuvo diferentes tenentes. En el siglo XIII pasó a ser propiedad de Jimeno González de Pomar y en 1429 era del barón de Fréscano. A finales del siglo XVI pertenecía al conde de Guimerá que al morir sin descendencia pasó a los Villahermosa.
El conjunto tiene una planta rectangular de aproximadamente 26 x 16 metros. Este castillo palacio conserva únicamente su parte baja, de sillería, ya que el resto ha sido transformado. La construcción original se encuentra muy alterada, pues hoy se integra en un edificio que sirve de almacén. Puede verse en la parte inferior de los muros S y O, de sillares de piedra arenisca. En el ángulo que forman quedan dos paredes de lo que podría ser una torre rectangular, con la base en talud y un ventanuco apuntado. Hay otros restos de una posible torre, de similar estructura subsisten en el extremo nororiental.
Se pueden apreciar también restos de vanos y puerta y alguna aspillera.
El acceso pudo estar localizado en la zona oriental y esta cara y la norte debieron de estar rodeadas por un foso, aunque toda esta área ha desaparecido. En los lados de la roca donde se asienta, hay una serie de aperturas que podrían ser entradas a bodegas o silos.