Castillo de Benabarre
El castillo de Benabarre fue conquistado en 1058 por Ramiro I. Fue lugar de realengo hasta 1137 y perteneció a los condes de Ribagorza. En él se libraron numerosas batallas y fue derribado a principios del siglo XVII y vuelto a utilizar en el XIX con nuevas ejecuciones permaneciendo activo en las guerras de Cataluña y Carlistas. Debido a estos conflictos bélicos se reconstruyó para transformarlo en fuerte fusilero.
Hoy parece más un fuerte del siglo XIX, aunque conserva muros más antiguos de cuando fue el castillo palacio de los condes de Ribagorza. Así, se trata de un conjunto monumental de un solo recinto donde se integran todas las transformaciones del inmueble paralelas a los avatares históricos.
Se sitúa en lo alto de la población y es visible desde varios puntos de la zona, la entrada se realiza mediante unas escaleras protegidas por un muro. Está formado por la iglesia románica y la fortaleza que datan del siglo XII. Consta de dos recintos, uno superior, más antiguo y de traza musulmana, del cual quedan paredones en la base de la roca en la que se asienta, así como la base de una torre de planta cuadrangular. En el siglo XIV se realizó una reforma y se edificó la iglesia gótica, la actual Santa María de Valdeflores, a la que se accedía bajo una puerta en arco apuntado y de la que se conserva el tramo de los pies. Se amplía el campanario, la cisterna rectangular del castillo y el cementerio, así como los lienzos del recinto inferior.
De los siglos XVI, XVII y XVIII datan los lienzos exteriores, con muros en talud, siendo más adelante fuerte fusilero con garitones situados en las esquinas norte del recinto.
Historia
Construcción original. Siglo X - XI
Reforma. Siglo XVI
Reconstrucción. Siglo XIX
Declaración. Siglo XXI, 2006-12-16
Restauración. Siglo XXI
Bibliografía relacionada
El castillo de Benabarre fue conquistado en 1058 por Ramiro I. Fue lugar de realengo hasta 1137 y perteneció a los condes de Ribagorza. En él se libraron numerosas batallas y fue derribado a principios del siglo XVII y vuelto a utilizar en el XIX con nuevas ejecuciones permaneciendo activo en las guerras de Cataluña y Carlistas. Debido a estos conflictos bélicos se reconstruyó para transformarlo en fuerte fusilero.
Hoy parece más un fuerte del siglo XIX, aunque conserva muros más antiguos de cuando fue el castillo palacio de los condes de Ribagorza. Así, se trata de un conjunto monumental de un solo recinto donde se integran todas las transformaciones del inmueble paralelas a los avatares históricos.
Se sitúa en lo alto de la población y es visible desde varios puntos de la zona, la entrada se realiza mediante unas escaleras protegidas por un muro. Está formado por la iglesia románica y la fortaleza que datan del siglo XII. Consta de dos recintos, uno superior, más antiguo y de traza musulmana, del cual quedan paredones en la base de la roca en la que se asienta, así como la base de una torre de planta cuadrangular. En el siglo XIV se realizó una reforma y se edificó la iglesia gótica, la actual Santa María de Valdeflores, a la que se accedía bajo una puerta en arco apuntado y de la que se conserva el tramo de los pies. Se amplía el campanario, la cisterna rectangular del castillo y el cementerio, así como los lienzos del recinto inferior.
De los siglos XVI, XVII y XVIII datan los lienzos exteriores, con muros en talud, siendo más adelante fuerte fusilero con garitones situados en las esquinas norte del recinto.