Casa Mur
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Casa Mur o Casa Antón Barrau es un excelente ejemplo de arquitectura renacentista altoaragonesa construida en la localidad de Bestué. Se le conoce también con la denominación de Casa Antón Barrau, dado el guardapolvo de la ventana central donde se lee este nombre de la los Barrau, antiguos propietarios.
Es un hermoso edificio de planta rectangular y considerable altura, cuenta con tres plantas, y en la actualidad se cubre con tejado a doble vertiente. En su cara norte se abre la fachada principal de estilo renacentista, cuenta con una magnífica puerta dovelada con escudo de la familia en la clave. En esta fachada, que no se ha visto alterada con el paso de los siglos, se abren tres ventanas originales por piso, todas adinteladas, con alféizares de piedra y adornadas con biseles y otros motivos antropomorfos.
Presenta una ventana central, y otra sobre ella con parteluz en cuatro espacios, a modo de cruz. En el guardapolvo del vano superior se lee la inscripción «ANTON BARRAU». Todos los muros presentan aspilleras, tanto redondas como de salida vertical, aunque las de la fachada noble están labradas sobre fondo de rosetón. Es necesario destacar el alero con 30 canecillos labrados con soberbia decoración renacentista.
Historia
Construcción original. Siglo XVI
Declaración. Siglo XXI
Bibliografía relacionada
Casa Mur o Casa Antón Barrau es un excelente ejemplo de arquitectura renacentista altoaragonesa construida en la localidad de Bestué. Se le conoce también con la denominación de Casa Antón Barrau, dado el guardapolvo de la ventana central donde se lee este nombre de la los Barrau, antiguos propietarios.
Es un hermoso edificio de planta rectangular y considerable altura, cuenta con tres plantas, y en la actualidad se cubre con tejado a doble vertiente. En su cara norte se abre la fachada principal de estilo renacentista, cuenta con una magnífica puerta dovelada con escudo de la familia en la clave. En esta fachada, que no se ha visto alterada con el paso de los siglos, se abren tres ventanas originales por piso, todas adinteladas, con alféizares de piedra y adornadas con biseles y otros motivos antropomorfos.
Presenta una ventana central, y otra sobre ella con parteluz en cuatro espacios, a modo de cruz. En el guardapolvo del vano superior se lee la inscripción «ANTON BARRAU». Todos los muros presentan aspilleras, tanto redondas como de salida vertical, aunque las de la fachada noble están labradas sobre fondo de rosetón. Es necesario destacar el alero con 30 canecillos labrados con soberbia decoración renacentista.