Casa Ayuntamiento
El Ayuntamiento de Fonz se ajusta a la tipología de las casas consistoriales aragonesas del siglo XVI. Se trata de la antigua residencia de verano de los obispos de Lérida hasta la Desamortización de los bienes eclesiásticos hacia 1836, ya que la villa dependía del Arzobispado de Lérida desde el siglo XII. A partir de entonces se utilizó como casa consistorial.
El edificio es de planta rectangular, tiene tres cuerpos de altura en la fachada norte y cinco en la fachada sur. Al interior, la configuración espacial está muy modificada por las reformas realizadas en el siglo XIX para adaptarla a su nuevo uso.
La fachada se organiza en una primera planta en sillería en la que se sitúa la portada y tres ventanas. La segunda planta es de ladrillo y en ella se abren cuatro ventanas adinteladas. El tercer piso aloja una típica galería de arcos de medio punto doblados y sobre ésta, el arranque del alero de madera con decoración labrada.
La decoración se centra en la portada y en el alero. La puerta adintelada está enmarcada por pilastras acanaladas que sostienen un friso en el que alternan triglifos y rosetas, coronándose con un frontón partido en cuyo centro se sitúa el escudo de la villa y con piramidones en los ángulos.
La fachada lateral no presenta elementos de interés, mientras que la posterior presenta varias ventanas adinteladas en las primeras plantas. En el piso superior hay una galería igual a la de la fachada principal, coronada también con alero.
Historia
Construcción original. Siglo XVI
- Renacimiento
Reforma. Siglo XIX
Declaración
Bibliografía relacionada
El Ayuntamiento de Fonz se ajusta a la tipología de las casas consistoriales aragonesas del siglo XVI. Se trata de la antigua residencia de verano de los obispos de Lérida hasta la Desamortización de los bienes eclesiásticos hacia 1836, ya que la villa dependía del Arzobispado de Lérida desde el siglo XII. A partir de entonces se utilizó como casa consistorial.
El edificio es de planta rectangular, tiene tres cuerpos de altura en la fachada norte y cinco en la fachada sur. Al interior, la configuración espacial está muy modificada por las reformas realizadas en el siglo XIX para adaptarla a su nuevo uso.
La fachada se organiza en una primera planta en sillería en la que se sitúa la portada y tres ventanas. La segunda planta es de ladrillo y en ella se abren cuatro ventanas adinteladas. El tercer piso aloja una típica galería de arcos de medio punto doblados y sobre ésta, el arranque del alero de madera con decoración labrada.
La decoración se centra en la portada y en el alero. La puerta adintelada está enmarcada por pilastras acanaladas que sostienen un friso en el que alternan triglifos y rosetas, coronándose con un frontón partido en cuyo centro se sitúa el escudo de la villa y con piramidones en los ángulos.
La fachada lateral no presenta elementos de interés, mientras que la posterior presenta varias ventanas adinteladas en las primeras plantas. En el piso superior hay una galería igual a la de la fachada principal, coronada también con alero.
Historia
Construcción original. Siglo XVI
- Renacimiento