Bodega Cerdán y Bodega Morales
La bodega Cerdán en Almonacid de la Sierra es una construcción de planta cuadrangular, con cubierta a dos aguas, teja al exterior y vigas de madera cubiertas de cañizo al interior, sostenida por un gran pilar central. En la nave auxiliar, en la superficie, se encuentran las compuertas de acceso en el suelo a los dos lagares, con capacidad de 370 hectolitros y toda la maquinaria de vinificación que consiste en una prensa de hierro de comienzos del siglo XX, tres estrujadores (de madera, hierro fundido y metálico) de la segunda mitad del siglo XX, una prensa horizontal sobre carro y una pequeña prensa de madera y hierro del siglo XX.
La cueva bodega esta abovedada y se sostiene con arcos fajones de ladrillo. Aquí se ubican dos cubas de 70 y de 50 hectolitros y en el canillero se vierte el mosto en la pila desde la parte superior.
La bodega Cerdán a lo largo de su historia ha recibido varios premios de rango nacional e internacional como el Premio de la Exposición Universal de París en 1889, la Medalla de plata a su producción y el Premio de la Exposición Vitivinícola de la Cámara de Comercio e Industria de Zaragoza celebrada en Cariñena en 1891.
La bodega Morales dispone de dos zonas bien definidas, la subterránea excavada en el cerro o bodega cueva y la nave almacén o dependencia auxiliar al nivel de la calle. La nave en superficie se organiza en dos niveles, ambos de planta rectangular, comunicados entre sí por unas pequeñas escaleras. La habitación superior es utilizada para uso particular. La segunda dependencia tiene techumbre a dos aguas, con vigas de madera y recubrimiento exterior de teja, la cubierta interior es de cañizo, las paredes son de adobe enlucidas. Alberga los 3 lagares, donde se vierte desde el exterior la uva para su primera fermentación, y con ayuda de una garrucha o polea se sacaban los capazos con la pasta obtenida preparada para la prensa. Las paredes de los trujales son de ladrillo enfoscado con mortero de cemento, así como el suelo y las paredes interiores. Frente a ellos se ubica la maquinaria y útiles tradicionales del proceso de vinificación, una gran presa de madera de husillo del siglo XVI o XVII, dos prensas de uva de husillo de madera y hierro ya de principios del XX, dos envasadores piperos, dos coladores de hojalata, una bomba de trasiego manual de comienzos del siglo XX, una rana de volante también del siglo XX, un cubillo de madera para recoger el vino, once cubas de madera con zarcillos de hierro con una capacidad entre 30 y 70 hectolitros y 20 toneles de unos 2 hectolitros cada uno.
La cueva o cava presenta un acceso por una escalera de piedra de nueve metros de largo por 1,20 metros de ancho que se cubre con bóveda. El trazado interior, con una largura de 26 metros, no es recto, presentando un quiebro casi de ángulo recto, que atraviesa por el subsuelo hasta la calle Obradores Altos. Está excavada en la tierra y sus paredes aparecen sin revoco tan solo con tierra apisonada y mampuesto de piedra pequeña muy desigual, su bóveda se sostiene mediante arcos fajones de ladrillo. Allí se ubican las impresionantes cubas de 130 hectolitros cada una, otras dos de 40, una de 30 y otra de 20 hectolitros. La galería subterránea alberga también 4 pilas de 400 hectolitros de capacidad, desde un canillero se da salida al mosto de vino que vierte desde el lagar superior.
Historia
Declaración. Siglo XXI, 2006-10-18
Bibliografía relacionada
La bodega Cerdán en Almonacid de la Sierra es una construcción de planta cuadrangular, con cubierta a dos aguas, teja al exterior y vigas de madera cubiertas de cañizo al interior, sostenida por un gran pilar central. En la nave auxiliar, en la superficie, se encuentran las compuertas de acceso en el suelo a los dos lagares, con capacidad de 370 hectolitros y toda la maquinaria de vinificación que consiste en una prensa de hierro de comienzos del siglo XX, tres estrujadores (de madera, hierro fundido y metálico) de la segunda mitad del siglo XX, una prensa horizontal sobre carro y una pequeña prensa de madera y hierro del siglo XX.
La cueva bodega esta abovedada y se sostiene con arcos fajones de ladrillo. Aquí se ubican dos cubas de 70 y de 50 hectolitros y en el canillero se vierte el mosto en la pila desde la parte superior.
La bodega Cerdán a lo largo de su historia ha recibido varios premios de rango nacional e internacional como el Premio de la Exposición Universal de París en 1889, la Medalla de plata a su producción y el Premio de la Exposición Vitivinícola de la Cámara de Comercio e Industria de Zaragoza celebrada en Cariñena en 1891.
La bodega Morales dispone de dos zonas bien definidas, la subterránea excavada en el cerro o bodega cueva y la nave almacén o dependencia auxiliar al nivel de la calle. La nave en superficie se organiza en dos niveles, ambos de planta rectangular, comunicados entre sí por unas pequeñas escaleras. La habitación superior es utilizada para uso particular. La segunda dependencia tiene techumbre a dos aguas, con vigas de madera y recubrimiento exterior de teja, la cubierta interior es de cañizo, las paredes son de adobe enlucidas. Alberga los 3 lagares, donde se vierte desde el exterior la uva para su primera fermentación, y con ayuda de una garrucha o polea se sacaban los capazos con la pasta obtenida preparada para la prensa. Las paredes de los trujales son de ladrillo enfoscado con mortero de cemento, así como el suelo y las paredes interiores. Frente a ellos se ubica la maquinaria y útiles tradicionales del proceso de vinificación, una gran presa de madera de husillo del siglo XVI o XVII, dos prensas de uva de husillo de madera y hierro ya de principios del XX, dos envasadores piperos, dos coladores de hojalata, una bomba de trasiego manual de comienzos del siglo XX, una rana de volante también del siglo XX, un cubillo de madera para recoger el vino, once cubas de madera con zarcillos de hierro con una capacidad entre 30 y 70 hectolitros y 20 toneles de unos 2 hectolitros cada uno.
La cueva o cava presenta un acceso por una escalera de piedra de nueve metros de largo por 1,20 metros de ancho que se cubre con bóveda. El trazado interior, con una largura de 26 metros, no es recto, presentando un quiebro casi de ángulo recto, que atraviesa por el subsuelo hasta la calle Obradores Altos. Está excavada en la tierra y sus paredes aparecen sin revoco tan solo con tierra apisonada y mampuesto de piedra pequeña muy desigual, su bóveda se sostiene mediante arcos fajones de ladrillo. Allí se ubican las impresionantes cubas de 130 hectolitros cada una, otras dos de 40, una de 30 y otra de 20 hectolitros. La galería subterránea alberga también 4 pilas de 400 hectolitros de capacidad, desde un canillero se da salida al mosto de vino que vierte desde el lagar superior.