Bílbilis

La denominada «Ciudad Romana de Bilbilis», situada en Calatayud (Zaragoza), fue declarado Monumento Histórico-Artístico por Decreto publicado en la Gaceta de Madrid núm. 155, de fecha 4 de junio de 1931.

El Boletín Oficial de Aragón del día 10 de febrero de 2003 publicó la Orden de 17 de enero de 2003, del Departamento de Cultural y Turismo, por la que se completa la declaración originaria de la denominada «Ciudad Romana de Bilbilis», en Calatayud (Zaragoza), conforme a la Disposición Transitoria Primera de la Ley 3/1999, de 10 de marzo, del Patrimonio Cultural Aragonés.

Narciso Sentenach y Cabañas, lleva a cabo en 1917, la primera campaña oficial de excavaciones que se realizó en el yacimiento ya que con anterioridad solamente habían sido cartas o búsquedas dedicadas a engrosar colecciones particulares.

Desde 1970, hasta ahora, hay que destacar los trabajos de excavación y estudio realizados por Manuel Martín Bueno. En las últimas décadas se ha excavado de forma sistemática en el yacimiento. El Departamento de Educación y Cultura de la Diputación General de Aragón incluye las actuaciones en Bílbilis en el Plan General de Arqueología y Paleontología y se procede a intervenir en convenio con instituciones como el Ayuntamiento de Calatayud, Universidad de Zaragoza, el INEM y el MEC, entre otras.

En 1997 se procedió a la limpieza general del yacimiento y se efectuaron sondeos de la terraza en las que se asentaban las termas. La información obtenida sirvió para establecer el plan de actuación a seguir en campañas que buscaran delimitar la insula y su relación con el urbanismo de la ciudad. En la excavación se ponen al descubierto una serie de estancias en torno a un atrio y se recuperan un importante volumen de molduras pertenecientes a su decoración.

Durante la campaña de 1998 se excava en las zonas: Teatro, Casa de los Signina y el edificio monumental C.IV, se llevan acabo trabajos de acondicionamiento y la Escuela Taller de Calatayud realiza tareas de protección en las descubiertas.

Los trabajos arqueológicos realizados a lo largo de 1999, se centraron en el Teatro y en una insula situada en la terraza en las que se ubican las Termas. Se procedió al cubrimiento de alguna de las zonas descubiertas en el conjunto de viviendas de las termas.

Desde el año 2000 se inician trabajos intensivos de excavación. Los trabajos arqueológicos realizados a lo largo del año 2000 se centraron en dos sectores: el conjunto de tabernas ubicadas en la zona Oeste del foro, y el sector urbano de las termas (Domus II y III).

En el verano de 2001 se retomó la excavación de la necrópolis medieval (siglos XII-XIII) ubicada en la zona sur del foro, debido al peligro de expolio. En 2002 se trabajó en el conjunto de viviendas de las termas, protegiéndose la totalidad de los suelos aparecidos (Domus III y IV). Además, se intervino en las estancias nº 27 y 28 correspondientes a dos tabernas en las que se han recuperado potentes niveles de pinturas, así como en el frente de esta domus que debió encontrarse porticada, como en el pórtico descubierto en la estancia 29.

Durante la campana del año 2003 se trabajó en la adecuación del yacimiento: accesos, retirada de tierras, limpieza y mejoras de adecuación a las visitas..., así como en trabajos de consolidación y protección. Esta campaña permitió documentar la presencia de importantes estructuras celtibéricas en el Bario de las Termas y certificar la importancia del edificio monumental C.IV.

En 2004 la campaña se desarrolla en el Municipum Augusta Bilbilis, llevándose a cabo trabajos arqueológicos, de adecuación del yacimiento, de consolidación y de protección del Centro de Investigación Arqueológica Marco Valerio Marcial y de topografía.

Los trabajos prosiguen durante el 2005. Se interviene en el Teatro romano fundamentalmente en la Cavea. Al término de la excavación se realizan trabajos de laboratorio, de topografía y de restauración. También se protegen restos hallados como pinturas murales y objetos muebles.

Del año 2005 al 2009 la Escuela Taller de Restauración de Aragón trabaja, en diferentes campañas, en la extracción de piezas, consolidación, limpieza y protección de las estructuras excavadas en los sectores III y IV del yacimiento. Se recuperaron fragmentos de decoración mural y se restauró el material mueble aparecido: piezas cerámicas e almcenaje y usos domésticos; sigillata; objetos de hueso, marfil o bronce; opus tessellatum… Gran parte de estas piezas están expuestas actualmente el Museo de Calatayud.

Entre los materiales recuperados en los últimos cinco años se encuentran un conjunto de doce capiteles que tras su restauración pasarán a formar parte de la colección del Museo de Calatayud. Otro de los hallazgos es una gran pieza escultórica, un torso masculino de gran interés procedente del teatro de Bílbilis, al que le falta la cabeza por lo que se sigue debatiendo a que emperador representaba. Aún queda mucho por excavar y los arqueólogos creen que todavía se pueden producir grandes hallazgos.